|
El término
relajar procede del latín relaxare que significa aflojar, de hecho relajarse
implica soltar la tensión a nivel muscular, nervioso, emocional y mental. La
relajación es una habilidad que puede ser aprendida a través de la
instrucción adecuada alcanzando su dominio mediante la practica atenta y
perseverante.
Toda tensión nerviosa, emocional o mental se somatiza en una tensión
muscular, respuesta natural que es efectiva y está muy bien organizada, pues
frente a un peligro el cuerpo reacciona para respaldar con prontitud y
energía las tres únicas posibles opciones: defensa, ataque o huida. Pero una
vez superada la crisis, el cuerpo tendría que disminuir el nivel de
activación y regresar a un estado de calma y relajación.
La excitación muscular se genera a partir de los impulsos nerviosos e inhibidores
que proceden de unos centros de control situados en la medula espinal y en el
cerebro que se activan por los estímulos sensoriales y por ende emocionales y
mentales que se producen ante una determinada situación. Una tensión nerviosa
o emocional o mental constante genera una tensión muscular crónica que no
permite la relajación, ni tan siquiera durante las horas de sueño, además
genera un gasto energético continuo que provoca fatiga y agotamiento.
Cada uno de los cuatro tipos de tensión se comunica y está en interacción con
el resto de tensiones, formando una red conectada que se alimenta y auto
perpetúa. Sin embargo la interconexión de la red permite que la relajación de
una parte relaje al conjunto. Si actuamos sobre el sistema muscular mediante técnicas
especificas de relajación, se activa un sistema de retroacción entre la
tensión muscular y la actividad cortical consciente que permite la relajación
nerviosa, emocional y mental, restaurando el equilibrio del entero sistema
energético.
Una sesión
de Qigong siempre empieza con una rutina de ejercicios destinados a relajar
los diferentes grupos musculares aplicando el método de relajación
diferencial, es decir, se presta atención y se toma consciencia al contraste
entre tensión y relajación, alternando movimientos corporales firmes y suaves
que se denominan yang y yin. La serie de ejercicios siempre incluye
estiramientos dado que un musculo estirado siempre está relajado. También
flexibiliza y abre todas las articulaciones del cuerpo, especialmente las de
los hombros y cuello y presta especial atención a la columna vertebral, eje
del cuerpo, y a sus discos intervertebrales que amortiguan los traumas entre
las vértebras pero que a la vez son vulnerables a herniarse y a comprimir
nervios, estos ejercicios entrenan la extensión, flexión y torsión de la
columna lo que proporciona suministro de nutrientes y alimento a las
vertebras que se mantienen sueltas y saludables.
A continuación relacionamos una rutina de ejercicios para relajar a nivel
musuclar:
Cuello
Rotar la
cabeza a izquierda y a derecha.
Subir y bajar la cabeza.
Ladear la cabeza a izquierda y a derecha.
Hombros
Girar los hombros hacia adelante con los brazos colgando. Luego hacia
atrás.
Mover los brazos haciendo giros hacia delante. Luego hacia atrás.
Mover los brazos haciendo círculos hacia el interior. Luego hacia el
exterior.
Inclinar levemente el tronco, los dos brazos basculan, a la vez, a izquierda
y a derecha gracias al impulso que procede de la flexión de las piernas.
Los brazos basculan uno adelante y otro atrás, a la vez, gracias al impulso
que procede de la flexión de las piernas.
Subir los hombros, dejarlos caer a su posición natural.
Muñecas
Unir palmas y entrelazar los dedos voltear las muñecas.
Unir palmas, postura de rezo, presionar izquierda y derecha (Extensión).
Llevar con la mano la otra mano hacia el interior del antebrazo (Flexión).
Cruzar los brazos, encarar las palmas, entrelazar los dedos, mover las manos
primero hacia dentro y luego hacia el exterior del cuerpo (Trabaja muñecas,
codos y hombros).
Soltar las muñecas con movimientos desde el antebrazo
Dedos
Entrelazar los dedos y voltear las palmas hacia el exterior (Extensión).
Flexión de los dedos (garra de leopardo).
Cintura
Rotación con los brazos extendidos a los lados.
Rotación soltando los brazos a un lado y al otro.
Caderas
Girar hacia la izquierda. Luego hacia la derecha.
Columna
Ladear hacia la izquierda y derecha.
Ejercicio de golpear una pared posterior con los brazos extendidos: arriba
con los dorsos de la mano, abajo con las palmas, a los lados con los dorsos y
también con los codos.
Rodillas
Masajear los lados, delante y detrás. Agarrar las rótulas y girarlas.
Pies juntos. Girar hacia la izquierda. Luego hacia la derecha.
Pies separados. Girar hacia adentro. Luego hacia afuera.
Tobillos
Con un pie sin peso en el suelo, girar hacia un lado y hacia el otro.
Cambio de pie.
Inclinarse hacia adelante y tocar el suelo (Columna).
Agacharse en cuclillas (Estira todo el tren de musculatura posterior).
Estiramientos de los músculos de las piernas.
El Qigong
también actúa sobre el sistema nervioso, que se denomina autónomo porque
revela la naturaleza autónoma de ésta activación. Clasificado en simpático y
parasimpático tiene las funciones de controlar la respiración, el ritmo cardiaco,
la presión sanguínea y la actividad digestiva. Depende de la activación de su
parte simpática o parasimpática que aumentaremos o disminuiremos la tensión
nerviosa. Como la respiración es la única función del sistema nervioso
autónomo que puede ser controlada y regulada por la conciencia y como el
Qigong interpreta al ser humano como una unidad funcional física, emocional y
mental, al regular la respiración se puede controlar el entero conjunto
funcional.
La sesión
de qigong engloba la práctica de respiración diafragmática, la mente se
focaliza y toma plena conciencia en el movimiento del abdomen que se hincha y
se deshincha como si fuera un globo, en el sonido que genera el aire cuando
entra por las aletas de la nariz, la sensación táctil que produce la entrada
del aire y la percepción del contraste de la temperatura del aire: más fresco
al entrar y más cálido al salir. El método de respiración diafragmático
denominado yin en el cual la fase de espiración de la respiración
diafragmática es más larga e intensa que la fase de inspiración es el más
efectivo para relajar todo el sistema y el Qigong lo aplica de forma
sistémica para movilizar la energía vital en caso de estancamiento.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario